Los de Santiago Abascal siguen adelante con su órdago a los seis gobiernos autonómicos en los que PP se apoya en Vox, y mantiene en suspenso las negociaciones para lograr impulsar los Presupuestos para 2025 amenazando el despliegue de –al menos– 77.014 millones de euros. Génova da por hecho que sus autonomías se verán obligadas a prorrogar sus Cuentas, arrebatando el argumento al que Feijóo se agarra para denunciar la inestabilidad parlamentaria que impidió el año pasado a Pedro Sánchez impulsar unos Presupuestos para 2024.
La formación de ultraderecha anunció el pasado martes que se levantaba de las mesas de negociación de las Cuentas autonómicas de Castilla y León, Aragón, Baleares, Murcia, Extremadura y Comunidad Valencia, después de que los de Núñez Feijóo retomaran las conversaciones con el Gobierno en busca de un acuerdo sobre la cuestión migratoria, pese a que las conversaciones entre ambos siguen atascadas. Ya lo hizo hace seis meses, cuando Abascal dio orden a los suyos de romper los gobiernos de coalición en cinco comunidades, ante el primer tanteo que Ejecutivo y oposición mantuvieron con la intención de acordar un reparto de los menores migrantes acogidos en las Islas Canarias.
El nuevo golpe de timón de Vox deja en una situación especialmente delicada al gobierno de Carlos Mazón. Cuestionado por su gestión de la crisis de la DANA, el presidente valenciano contaba con impulsar unas cuentas con las que seguir desplegando las ayudas y préstamos a los afectados por la catástrofe. El portazo de los Abascal deja a Mazón en manos del PSOE, que ya anunció que apoyaría las Cuentas del PP para facilitar la gestión de la emergencia. El Consell tenía previsto presentar sus cuentas para el año que viene en los primeros días de noviembre; sin embargo, el estallido del desastre obligó al gobierno valenciano a rehacer los Presupuestos „a marchas forzadas”. A falta de presentar cifras, la Comunidad Valenciana desplegó en 2023 unas Cuentas por valor de 31.521 millones de euros. Está previsto que esa cantidad sea mucho mayor en el nuevo proyecto de ley.
Otras cinco CCAA gobernadas por el PP también se juegan sus Presupuestos. Marga Prohens diseñó unas cuentas de 5.254 millones para Baleares; Alfonso Fernández Mañueco, 15.084 millones para Castilla y León; López Miras planteó el pasado 19 de noviembre más de 8.300 millones para la Región de Murcia, y Aragón buscaba elevar el presupuesto de 8.500 millones que aprobó ya el año pasado. También Extremadura ha visto como su proyecto de ley –de 8.309 millones– ha quedado bloqueado ante la falta de apoyos parlamentarios.
Detrás de todo esto, se esconde un movimiento estratégico de Vox para tratar de presentar al PP ante una disyuntiva. Abascal busca dejar a Feijóo en tierra de nadie en un asunto –el de la inmigración– que ha tomado especial relevancia en Bruselas. „No hay una formación política más predecible que Vox que dice claramente cuáles son sus planteamientos en materia migratoria, en materia fiscal, en materia de seguridad, en materia de vivienda”, dijo el pasado miércoles el secretario general de Vox, Ignacio Garriga. Fuentes de la formación no descartan un adelanto electoral en alguna de estas regiones, algo que el PP descarta. No obstante, durante las últimas horas el número dos de Guardiola en el Ejecutivo extremeño deslizó la posibilidad de convocar unos nuevos comicios, ante el bloqueo de sus presupuestos. „Significa frenar el crecimiento de Extremadura”, dijo el consejero de la Presidencia, Abel Bautista.
Los de Abascal mantendrán el pulso hasta el final. Seguirán adelante con el bloqueo hasta que Feijóo se levante de la mesa en la que se negocia la ley de extranjería. „El señor Núñez Feijóo está obligado a elegir. Le pedimos que tenga sentido de Estado y no claudique ante las amenazas de Vox”, reclamaron fuentes de Ferraz ayer, poco antes de la reunión de más de dos horas entre el portavoz parlamentario popular, Miguel Tellado, y el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, que terminó sin avances. Los de Feijóo solo aceptará un texto que integre todas sus demandas, por lo que el acuerdo parece más alejado que nunca. Aun así, ninguna de las dos partes da por rota la ‘vía diplomática’.
„Vox se equivoca de adversario. Somos un partido de Estado, tenemos responsabilidades de Gobierno en Canarias”, dijo ayer Tellado, que acusó al equipo del ministro Torres de acudir al encuentro sobre la ley de inmigración „sin propuestas”. Aun así, Vox es tajante. „Si quieren negociar los presupuestos con nosotros, que rompan los pactos con Sánchez”, respondió Santiago Abascal.
Todo dependerá de lo que ocurra en las próximas horas. El PP parece obligado a intentar el acuerdo con el Gobierno, con la intención de desatascar la situación que sufren tres territorios de los que forman parte: Canarias (con una vicepresidencia) y Ceuta y Melilla. No obstante, el vacío de Presupuestos en el resto de sus CCAA pone en riesgo la continuidad de las legislaturas autonómicas.